No es casualidad que hayas llegado aquí.
Este sitio sobrepasa las divisiones humanas religiosas. Es para todos los extranjeros, coherederos de la promesa, quienes esperamos la ciudad con fundamentos, todos esos que “no cabemos,” – sedientos de verdades espirituales e insatisfechos de la insuficiencia humana – ante todo un sitio para los que preguntan: “Hay más de la vida?”
Su Fundamento nació de una visión que por diez años ardió en mi corazón para compartir el Reino de Dios. Aunque los recursos fueron pocos y nuestro conocimiento de web design limitado, mi hermano Enrique tuvo fuerza y paciencia para aprender un lenguaje tecnológico. Estando a mi lado, asistió creando este sitio. Afortunadamente, su esposa Carla nos preparaba deliciosos platillos mientras trabajábamos en el proyecto por horas. Su Fundamento es por siempre una obra de amor. Espero encuentren un sitio acogedor sin pretensiones.
Mi oración es que conozcamos la naturaleza amorosa de Dios.
Que Dios te haga tan fuerte que nadie pueda herirte, tan grande que todos quieran alcanzarte y tan humilde que todos quieran imitarte.
Siempre…
