Su Fundamento

Entre el Imperio y el Reino: Crónica de Nabónido (Parte 8)

La tablilla original está algo fragmentada, pero los especialistas han reconstruido gran parte de su contenido. Se puede dividir en tres secciones principales:

1. Primeros años del reinado de Nabónido

Se menciona cómo Nabónido subió al trono.

Introdujo cambios religiosos que causaron tensión, como el favorecimiento del dios Sîn (dios de la luna), en detrimento del dios nacional Marduk.

Se lo critica por descuidar las festividades tradicionales, como la Akitu (fiesta de año nuevo babilónica), esenciales para la legitimidad del rey.

2. Ausencia prolongada de Nabónido

Nabónido dejó Babilonia durante alrededor de 10 años para establecerse en Temá, un oasis en el noroeste de Arabia.

Durante su ausencia, su hijo Belsasar (Belšarrauṣur, conocido también por su mención en la Biblia) gobernó como corregente en Babilonia.

La crónica lo acusa de no realizar los deberes religiosos del rey y de causar el abandono del culto a Marduk.

3. Conquista de Babilonia por Ciro el Grande

En el año 17 del reinado de Nabónido (539 a.C.), el ejército de Ciro II, rey de Persia, derrota a las fuerzas babilónicas en Opis, al norte de Babilonia.

Babilonia cae sin lucha significativa, y Ciro es recibido favorablemente.

Nabónido es capturado en Babilonia, pero no se menciona su ejecución; probablemente fue exiliado.

Descubrimiento y estado actual

La Crónica de Nabónido fue descubierta en el siglo XIX en Babilonia (cerca de la actual ciudad de Hillah, en Irak).

Está escrita en una tablilla de arcilla cuneiforme.

Actualmente se conserva en el British Museum (Londres) con el número de catálogo BM 35382.

Aunque está fragmentada, sigue siendo una de las fuentes más importantes del periodo final de Babilonia.

Importancia histórica

Es una fuente valiosa para estudiar el fin del Imperio neobabilónico.

Muestra el punto de vista del clero babilónico, que desaprobaba a Nabónido.

Es también una pieza clave en el diálogo entre historia bíblica y arqueología, ya que el personaje de Belsasar aparece tanto en esta crónica como en el Libro de Daniel, lo que en su día ayudó a confirmar la historicidad de ese personaje.

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